25 de noviembre de 2024

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De Crónicas

VI. ÁVILA 1958. 75 AÑOS DE LA CIUDAD RENACIDA A VISTA DE PÁJARO. LA CATEDRAL

VI. ÁVILA 1958. 75 AÑOS DE LA CIUDAD RENACIDA A VISTA DE PÁJARO. LA CATEDRAL
VI. ÁVILA 1958. 75 AÑOS DE LA CIUDAD RENACIDA A VISTA DE PÁJARO. LA CATEDRAL
Jesús Mª Sanchidrián Gallego
  • 23 de Enero de 2024

La catedral de Ávila primero fue románica y después gótica de transición, y es que empezó a construirse en el siglo XII bajo la dirección del Maestro Fruchel y no concluyeron las obras hasta el siglo XVI.

Ahora vemos Ávila con diadema de piedra, coronada de almenas abrochadas  por el cimorro de la catedral, y enseguida se nos aparece  la imagen del castillo interior de Santa Teresa.

            El conjunto catedralicio está situado en lo más alto de la ciudad y por tanto más cerca del cielo y de  Dios. La catedral preside  y orienta la ciudad a la que todos miran.

El cimorro  fortaleza cierra la Muralla por el Este. A su izquierda sigue la calle de San Segundo con edificios  de pisos adosados a la Muralla  de torreones desmochados. Por la derecha están la casa de las Carnicerías y el antiguo Hospital de San Martín, a cuya espalda se halla en antiguo palacio del rey niño y el “episcopio”, en el patio o corralón junto se ubicaba el Parque Municipal de Servicios que pronto debía dejar el espacio para la Casa de Cultura y actual Biblioteca de Ávila.

Estamos en la parte superior del recinto amurallado, una planicie de casas blasonadas y palacios, en cuyo centro se hallan la plaza del Mercado Chico y el Mercado de Abastos que proyectó Repullés en 1893 y que fue demolido en los años sesenta. En el horizonte, la carretera de  Gredos y Piedrahita y  el río Adaja son el límite natural que separa la ciudad de las estribaciones de San Mateo.

 

6) VIVIENDAS SOCIALES.  Una interesante promoción de viviendas plurifamiliares de dos plantas con patio exterior construidas en piedra  y proyectadas por el arquitecto Ricardo Salas abren la ciudad al viajero que llega por la carretera de El Escorial y continúa por la Avda. del 18 de julio, actualmente de los Hornos Caleros.

Esta arteria principal   marca el crecimiento de la ciudad formando un cuadrante con la línea férrea donde predominan centenares de viviendas sociales promovidas  en la década por la Obra Sindical del Hogar  y la Delegación Nacional de Sindicatos del gobierno de Franco.

Como cabeza de buque insignia del nuevo barrio de la Estación se sitúa la iglesia del Inmaculado Corazón de María, a cuya  fachada  se ha incorporado  la portada de la demolida iglesia de Santo Domingo que estaba en el recinto amurallado detrás del convento de la Santa. Enfrente se levantan los edificios de viviendas de los Pabellones Militares de la Academia de Intendencia y de los funcionarios del Instituto Nacional de Previsión, dichas construcciones  delimitarán las calles  Alfonso de Montalvo y Héroes del Alcázar.

La imagen del nuevo paisaje urbano es un fiel exponente de la política de vivienda del momento, la cual se repite formando un anillo extramuros a las afueras de la ciudad, donde se combinan edificios de pisos de tres y cuatro alturas con viviendas de planta baja formando los grupos de casas nombrados “San Juan de la Cruz”, “Onésimo Redondo”, “Pío XII”, “Luis Valero”, “Bernardino González”, “11 de enero”, etc.

A lo lejos de la imagen sobresalen por su aislamiento el puente de la línea férrea de Salamanca inaugurada en 1922, el singular edificio del colegio de huérfanos ferroviarios construido a principios de la década según proyecto de Francisco Alonso Martos. Un poco más cerca están el convento de la Encarnación y la arboleda de la finca La Viña.