Hay poetas que han derramado en la vida todo un sistema de sensaciones y de señales que hacen de ellos un lugar donde encontrar la materia más intensa de la poesía. Trakl ha escrito una de las obras más hondas y más sugerentes de la poesía del sufrimiento, de la mirada corrosiva y difícil de sostener desde su creatividad expresiva y contundente.
Dicen que los grandes hombres mueren muy jóvenes, sobre todo en épocas donde las guerras y los enfrentamientos están presentes sn las sociedades y en los pueblos de manera constante. La dificultad del poeta es insalvable desde sus inicios hasta su muerte brusca, víctima de una sobredosis.
Trakl es un visionario que precisó meterse dentro, como curioso viajero por las oscuridades del ser, para poder existir en su breve existencia, para conseguir acercarse hasta la dolorosa sensación de dolerse en lo más hondo de sus paraísos de nubes tormentosas, de precipicios insalvables, de desequilibradas mazmorras del alma.
Sebastián en sueños es un libro inmenso, pleno, obra de desencantadas páginas de silencio abismal.El poeta se purifica con su peregrinaje por el verso, por la luz del entendimiento, por el fluir invisible de las aguas del océano de la desolación.
Ocaso
Sobre el estanque blanco
han pasado los pájaros silvestres.
Desde nuestros astros sopla el atardecer un viento gélido.
Se inclina sobre nuestras tumbas
la quebrantada frente de la noche.
Y en la barcaza plateada nos mecemos bajo las encinas.
Los blancos muros de la ciudad resuenan siempre
oh, hermano mío, subimos ciegas manecillas hacia la medianoche.
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